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En defensa de la auténtica Gnosis de los Mundos Interiores

 

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ESTUDIO SOBRE EL EGO

 

“El despertar (continuo) de la Conciencia solo es posible disolviendo el YO, muriendo en uno mismo, aquí y ahora”. (V.M. Samael Aun Weor)

 

Sabemos que el primer factor de la Revolución de la Conciencia es la muerte del Ego o la muerte de los defectos psicológicos. Por esta razón es necesario estudiar, conocer exactamente cómo actúa el ego dentro de nosotros.  El primer punto en el estudio del ego es comprender que en realidad existe una multiplicidad de egos dentro de nosotros, que se manifiestan a cada instante, a cada momento.

 

Como tenemos atrofiado el sentido de la autoobservación, es común que nos identifiquemos con las situaciones cotidianas, lo que nos dificulta aún más practicar la muerte del ego. Pero si realmente queremos y nos esforzamos en el trabajo sobre nosotros mismos, nuestro Padre y Madre internos, así como las Jerarquías Divinas, nos ayudarán. Al iniciar este trabajo, recibiremos orientación para eliminar todos estos defectos, que de alguna manera esclavizan nuestra Esencia.

No es nada fácil aceptar la multiplicidad de los yoes, pero si prestamos atención a nuestro interior, verificamos que no somos siempre la misma persona, que hay muchas personas viviendo en nuestro interior. Cambiamos de opinión continuamente, no existe una verdadera individualidad en nosotros.

 

“Cuando se sigue con la absurda convicción de que se es uno, de que se posee un yo permanente, resulta más que imposible trabajar seriamente sobre uno mismo”. (V.M. Samael Aun Weor)

 

Para saber cómo se manifiestan, cómo actúan, de qué manera nos roban nuestra energía y cómo adormecen la poca conciencia que aún nos queda, es de suma importancia aprender a practicar la autoobservación. Autoobservarse es poner nuestra atención de forma intencionada y dirigida en todos nuestros pensamientos y emociones, instante a instante, momento a momento.

 

Con la autoobservación dirigida a nuestro interior, a nuestros sentimientos, nuestras ideas, nuestros deseos, nuestras reacciones, en nuestro hogar con la familia, en nuestro trabajo, en todas las diversas situaciones que ocurren en el día a día, arrojaremos luz sobre nuestras tinieblas internas.

 

“El hecho concreto y definitivo de que el trabajo íntimo comienza con la atención concentrada en la observación plena del mí mismo es motivo más que suficiente para demostrar que esto exige un esfuerzo personal muy particular de cada uno de nosotros”. (V.M. Samael Aun Weor)

 

Hemos aprendido que el Ego es el conjunto de defectos psicológicos (yoes) de los que tenemos siete principales, que son cabezas de legión: lujuria, ira, avaricia, pereza, gula, orgullo y envidia.

 

También tenemos varias ramificaciones del ego, a las que llamamos «detalles», que son miniaturas o pequeñas manifestaciones que tienen la función de alimentar todos esos yoes que poseemos en nuestro interior. Son tan pequeñas que a menudo pensamos que no son nada y no les prestamos atención, pero estas manifestaciones, ya sea en nuestra mente, corazón o centro sexual, roban mucha energía de estos centros, provocando el desequilibrio de la máquina humana.

 

Al poner la atención en estos tres centros (corazón, mente y sexo) veremos todas estas ramificaciones o detalles en acción. Son manifestaciones tan sutiles que no nos damos cuenta de que son defectos.

 

Por ejemplo, a menudo, en nuestras conversaciones triviales, en relación con algo o alguien que nos ha disgustado, podemos decir esta frase: «¡Ah, qué rabia me ha dado!». Ahí hay un pequeño detalle actuando en ese momento...

 

Podemos ver los «yoes» de la ira manifestándose cuando reaccionamos externa o internamente, cuando algo nos molesta o nos desagrada, o incluso cuando simplemente alguien nos dice algo que no nos gusta.

 

También veremos los «yoes» de la gula actuando cuando repetimos varias veces algún plato dulce o salado, incluso cuando nuestro cuerpo ya nos ha avisado de que está satisfecho.

 

Es fundamental que todo estudiante gnóstico sepa que el ego o todas sus ramificaciones (detalles) llevan dentro partes de nuestra Esencia o Conciencia, es decir, aprisionan lo más valioso que tenemos dentro de nosotros.

 

Por eso este tema es tan importante para nosotros. Así, cuando comenzamos a morir verdaderamente, vamos liberando poco a poco nuestra Esencia y nuestras virtudes, convirtiéndonos en mejores personas, cometiendo menos errores en nuestra vida.

 

“La Esencia Libre nos confiere una belleza íntima; de tal belleza emanan la felicidad perfecta y el amor verdadero...” (V.M. Samael Aun Weor)

 

 

Detalles diversos en nuestro día a día

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Todas nuestras reacciones internas y externas, los pequeños detalles, deben ser observados, ya que alimentan constantemente nuestros defectos.

 

Los diferentes acontecimientos y eventos del día nos brindan excelentes oportunidades para practicar la “Muerte en Marcha”.

 

 

Ejemplos:

 

Cuando vivimos solos

 

El vehículo de actuación de los «yoes» se produce a través de nuestra mente, que incluye nuestros tres cerebros. Hay un dicho que dice: «Más vale solo que mal acompañado»; sin embargo, en estos estudios hemos comprobado que muchas veces, cuando estamos solos, estamos muy mal acompañados. Y esto se debe a toda esta multiplicidad de pensamientos, conversaciones internas, recuerdos de los acontecimientos del día, de lo que nos han contado, etc. Asuntos de todo tipo, que se procesan sin cesar.

 

 

Con nuestra família

 

En la relación con nuestra esposa, hijos, padres o familiares cercanos, podemos observar las manifestaciones de los detalles del ego en diversas situaciones:

 

a) En una simple broma hecha por un familiar, podemos sentirnos ofendidos y no gustarnos;

 

b) Sentimos ganas de responder cuando nos dicen palabras groseras;

 

c) Podemos reaccionar negativamente cuando nuestros hijos nos llaman la atención por algo que hemos olvidado o dejado de hacer;

 

d) Lo que sentimos internamente cuando un familiar compra un coche mejor o más nuevo que el nuestro...

 

e) Un detalle del ego puede manifestarse cuando nos comemos todo el dulce para untar en el pan sin acordarnos del resto de personas de la casa;

 

f) Lo que sentimos cuando vemos que alguien se ha comido el pedazo de torta que había en la heladera y que estaba reservado para nosotros;

 

g) Cuando no nos invitan a la celebración del cumpleaños o la boda de un hermano o pariente, mientras que toda la familia o incluso alguien que no es de la familia sí ha sido invitado;

 

“P- ¿Debemos entender que los detalles son cualquier cosa?  V.M. Rabolu: Minúsculos. Cosas muy pequenas”. 

 

 

En el trabajo:

 

a) Cuando un compañero o superior nos llama la atención por algo que hemos dejado de hacer o que hemos hecho mal, en ese momento, en ese instante, si nos observamos a nosotros mismos, podemos sentir la reacción interna de algún detalle, de un ego herido, ya que nos consideramos demasiado y de inmediato se procesan pensamientos negativos contra nuestro compañero, que a menudo solo está haciendo su trabajo o ayudándonos.

 

b) Cuando nuestro compañero de sección recibe un elogio o es ascendido a un puesto superior al nuestro, debemos prestar atención a nuestras reacciones internas.

 

“...Ya sea en nuestro trabajo, en nuestro negocio, hablando con cualquier persona, ahí es donde tenemos que estar, para ver qué elemento psíquico puede manifestarse allí o se está manifestando”. (V.M. Rabolu)

 

Otros ejemplos:

 

 

1) En la academia

 

En este entorno destinado a la práctica de ejercicios físicos también podemos descubrir muchos detalles dentro de nosotros mismos:

 

a) Cuando vemos a una persona del sexo opuesto que nos parece muy atractiva, si estamos atentos, inmediatamente notamos la manifestación de un detalle de lujuria.

 

b) Cuando alguien está ocupando un aparato que tú quieres usar, pero esa persona está tardando más de lo normal en terminar sus ejercicios.

 

 

2) Internet y redes sociales (WhatsApp, Instagram, Tiktok, Telegram, etc.):

 

Cuando se trata de redes sociales, es fundamental saber que también somos juzgados por las jerarquías por nuestras acciones o por lo que escribimos. Porque las redes sociales son una continuación, aunque virtual, de nuestra vida aquí en el mundo físico.

 

Si nos detenemos a reflexionar sobre las reacciones negativas que pueden producirse en nosotros, veremos que seguimos alimentando el ego y, en consecuencia, nuestros centros quedan completamente desequilibrados.

 

a) En períodos electorales se manifiestan muchos detalles, cuando discrepamos de otras personas, cuando discutimos por tal o cual candidato;

 

b) Cuando miramos imágenes o vídeos sensuales o escenas lujuriosas que aparecen en Internet o en las redes sociales;

 

c) Al observar en las redes sociales la vida de otras personas, los eventos en los que participan, sus familias, algunas también famosas, con sus casas, coches de lujo, viajes, fiestas, etc., se manifiestan diversos detalles relacionados con los siete pecados capitales en cada escena que visualizamos o con la que interactuamos.

 

“Entonces, si empezamos a privar al ego de alimento, entonces sí, empezamos a comprenderlo y empieza a perder fuerza. Es inevitable”. (V.M. Rabolu)

 

Una vez descubierto el detalle, debemos concluir inmediatamente el proceso de muerte del mismo, pidiendo su desintegración a través de nuestra Madre Divina, que es una parte de nuestro SER, responsable de este trabajo.

 

 

Muerte en marcha

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Llamamos a este trabajo “Muerte en marcha”, porque debemos pedir la muerte de los detalles en el momento en que se manifiestan, ya que le quitamos el alimento al defecto principal y así muere más rápidamente. Como los detalles son pequeñas ramificaciones del ego, no tienen mucha fuerza, nuestra Madre Divina los desintegra instantáneamente y a partir de ahí ya no tenemos que pensar más en ellos.

 

Pedimos con fuerza: “¡Mi Madre Divina, desintegra este defecto!”.

 

"P: Maestro, entonces, ante cada pensamiento que surge, ¿lo mejor es no prestarle atención?

 

V.M. Rabolu: ¡Muerte en marcha! Saber que un pensamiento que ha surgido, ya sea morboso o de cualquier otro tipo, es un ego. Entonces, ¡muerte en marcha! ... Entonces, ¿qué es lo que... ¿Aún no lo has asimilado? ¡Ah! Claro, para eso es la muerte en marcha. Apelar a la Madre Divina: “¡Madre mía, desintegra ese defecto!” ¡Eso es un yo, una ramificación, una raíz!".

 

Así, todo estudiante que quiera seguir el camino del despertar debe continuar practicando diariamente, sin descanso, la autoobservación y la muerte de los egos. La muerte de los egos es tan importante para el estudiante que abre otras posibilidades en nuestro desarrollo interno, primero despertando aquí en el mundo físico y luego despertando en la dimensión astral, en la que también logra salir conscientemente en cuerpo astral.

 

«Si queremos conquistar el mundo astral y la proyección consciente, necesitamos, además de disciplina y concentración, trabajar durante el día con nuestros defectos, ya que son ellos los que mantienen su conciencia dormida»

 

¡Paz Inverencial!

 

 

 

Colaboración: Estudiantes  Gnósticos de Gnosis para los Pocos / S.O.S.